LA JOVEN CON TRES PADRES BIOLÓGICOS: ALANA SAARINEN
Muchas veces nos han mirado y nos han dicho “¡Tienes los ojos de tu madre y la nariz de tu padre!” Quizá algo como… «¡Tienes el cabello igual a tu padre y la boca de tu madre!” Bien, imagínate que te digan “Tienes los ojos de tu madre, la nariz de tu padre… y la boca de tu otra madre”
Bueno, un poco caricaturesco y absurdo, pero sirve para comenzar a hablar de Alana, la chica que tiene tres padres biológicos. Vamos a conocer su peculiar historia.
Un novedoso tratamiento de fertilidad
Se estima que el genoma humano está compuesto de 30.000 genes, de lo cuales sólo 37 están alojados en el genoma mitocondrial y el resto en el nuclear. Muchas enfermedades congénitas y malformaciones están asociadas a genes ubicados en el genoma mitocondrial. El ADN mitocondrial proviene solo de la madre, probablemente porque los óvulos contienen más moléculas de ADN que el esperma.
A grandes rasgos, el procedimiento consiste en colocar el núcleo de la madre “original” en el citoplasma de una segunda mujer, al que previamente se le quitó su núcleo.
El caso de Alana
Lo novedoso es que Alana se desarrolló perfectamente bien y ni ella ni su madre pasaron por dificultad alguna, mientras que, con el mismo procedimiento, hubieron casos de abortos y malformaciones.
En el caso de Alana, el problema no eran genes defectuosos ni posibles enfermedades o malformaciones. Su madre había intentado la fertilización in vitro durante más de diez años, siempre sin éxito, razón por la que los enbriólogos del St. Barnabas aventuraron que sus mitocondrias eran “defectuosas” y podían reemplazarse mediante un trasplante de citoplasma.
En definitiva, el embrión de Alana estaba compuesto por las células masculinas de su padre, células femeninas que tenían núcleo de su madre y citoplasma de una donante. Por lo tanto, Alana tiene ADN de tres personas diferentes.
La polémica alrededor del reemplazo mitocondrial
Esta práctica aún es objeto de arduo debate. No se ha logrado consenso sobre la enorme utilidad que puede tener en materia de discapacidades, calidad de vida y salud pública. En primer lugar, porque sus resultados no han sido suficientemente estudiados. Se estima que existen entre 30 y 50 personas en el mundo que nacieron bajo este procedimiento y ese parece no ser un número del todo concluyente.
En segundo lugar, la polémica gira en torno a la posibilidad de “jugar a ser dios”. Todo lo que tiene que ver con manipulación genética está inmerso en esta polémica, pero este procedimiento en particular implica la posibilidad de que dos padres creen un hijo biológico propio, con material genético de alguien más.
Sin duda alguna, la investigación y el desarrollo en términos de genética es un enorme desafío para la ciencia. Pero en este caso, a mi entender, el principal desafío es más bien cultural. ¿Debemos acaso pensar que Alana tiene tres padres o sólo debemos considerar a sus padres “originales”?