LOS HUMANOS TENEMOS MÁS DE CINCO SENTIDOS: NO ESTAMOS HABLANDO DE LA INTUICIÓN
De acuerdo, la vista, el gusto, el oído, el olfato y el tacto. Pero ¿sabías que éstas no son las únicas formas a través de las cuales nuestro organismo capta información del entorno? Pues sí, hay muchos otros más.
Quizás el más relevante sea la llamada nocicepción, la capacidad de nuestro cuerpo para sentir dolor. También está la propiocepción, aquella capacidad que le permite al cuerpo conectarse sin la necesidad de un estímulo visual y que puedes comprobar cerrando tus ojos y tocándote la nariz al mismo tiempo. Cuando te golpeas por accidente, por ejemplo en la frente, significa que ha ocurrido una falla en tu propiocepción.
También se encuentra la equilibriocepción o sentido del equilibrio que es uno de los sentidos fisiológicos. Les permite a humanos y animales caminar sin caerse.
Algunos neurólogos afirman que el ser humano podría tener hasta 21 sentidos, en total. Sentido de la sinestesia, que consiste en combinar sentidos de forma que, por ejemplo, la música se pueda percibir en colores o que el color rojo huela a limón.
Algunos animales poseen sentidos aún más extraños que los nuestros. Lo tiburones, por ejemplo, poseen electrocepción: les permite percibir los campos eléctricos. Muchas aves e insectos se guían por el mundo a través de la magnetocepción, que detecta los campos magnéticos de la Tierra, como un GPS natural. Los peces emplean la ecolocalización y la “línea lateral” para percibir la presión.